Se nos había acabado el aceite y durante el fin de semana hemos echado una escapada a Bruselas, ciudad del norte de Europa famosa por sus olivos, para comprarlo. Ya que estábamos, nos metimos unas moules frites (él) y unos (unos cuantos) gofres (yo).
Alabado sea el aeropuerto de Valladolid/Villanubla. Y ahora, como medida de presión para reclamar un vuelo diario Valladolid/Venecia, anuncio desde esta página que me voy a encadenar desnuda a las puertas de la Cortes de Castilla y/ o dónde haga falta. La horrible amenaza va en serio y el tiempo escasea, se me está acabando la soppressa de casada (pinchad aquí para saber qué es) y tengo que echar urgentemente una escapada a Padua para comprarla.
Llegué un poco empalagada de tantos gofres y chocolates, así que nada mejor que una pasta con verdura para que todo vuelva a la normalidad.
Cuenta la leyenda que delante de un suculento plato de pasta con berenjena que le ofrecieron unos amigos durante una cena, el famoso comediógrafo de Catania Nino Martoglio exclamara "Señora,¡ ésta es una verdadera Norma!". La frase significa que para él el plato de pasta era tan excelente como la ópera homónima de Vincenzo Bellini, nacido también en Catania. En esa tierra que tanto quiere al compositor, la palabra "Norma" es sinónimo de algo sublime, se trate de lo que se trate. Este plato mítico de la cocina siciliana es ya tan famoso cómo la ópera de Bellini.
Ingredientes para 4 personas:
350 gr de pennette rigate u otro tipo de pasta corta (en mi caso se trata de lazos muy pequeños de la serie "I piccolini" de Barilla)
500 gr de tomates maduros y jugosos
2 berenjenas de unos 400 gr en total
2 dientes de ajo
un manojito de albahaca fresca
100 gr de ricotta salada (el original exige que también sea "infornata", es decir, "horneada", pero se hace lo que se puede)
aceite de oliva virgen extra
aceite para freír
sal gorda
pimienta
Cortar las berenjenas en lonchas de 2-3 mm de grosor; si se considera oportuno, dejarlas soltar el eventual jugo amargo (cada vez más raro en las berenjenas, la verdad) en un escurridor, con un poco de sal gorda y un peso por encima, durante 1 hora. Pasado este tiempo, lavar y secar las rodajas de berenjena.
En una sartén con abundante aceite caliente, freír pocas berenjenasa la vez, para evitar que se pongan una encima de otra. Dejarlas escurrir en papel de cocina, salándolas según se vayan sacando del aceite.
Mientras, preparar la salsa de tomate. Hervir los tomates enteros en agua unos segundos, quitarles la piel y las semillas y cortarlos en daditos. En una sartén calentar 4 cucharadas de aceite de oliva, echar los dientes de ajo pelados, dejarlos dorar y luego quitarlos. Añadir el tomate, algunas hojas de albahaca fresca, sal y pimienta y dejar que la salsa coja cuerpo y espese; con cocción lenta se tardará casi un ahora.
Cocer la pasta al dente, escurrirla, echarle la salsa de tomate, remover bien, completar cada plato con unas cuantas berenjenas fritas y una generosa dosis de ricotta salada rallada.
11 comentarios:
No he podido "capire" lo de la sorpresa de casada... pero me ha gustado la anécdota de "Norma"...
¿En Padua todavía no se ha generalizado la expresión "señora, ¡ésta es una auténtica cannella!"? ;)
E' buona , mamma la prepara spesso, non ci vuole tanto tempo. Buon ferragosto
Ya se de donde eran esas fotos. Supongo que estando en Bruselas habrá caído algo de chocolate, no?.
Mis disculpas por el affaire "fumbo".
Un bacio.
Acertadísima la utilización de “Norma” como sinónimo de sublime, ya que lo sublime no tiene por qué estar reñido con sencillez. La ópera “Norma” y el sin duda magnífico resultado de este plato a base de tan solo cuatro ingredientes así lo demuestran.
En París, Rossini aconsejaba a un todavía desconocido Bellini que revistiera con más cuerpo los acompañamientos orquestales de las deliciosas melodías de sus óperas, pero el compositor de Catania siguió siempre por su camino, y junto a Rossini i Donizetti, el nombre de Bellini figura en letras de oro en la historia del bel canto.
Me gustaría recomendar este enlace
http://www.youtube.com/watch?v=kqxjpDyLWP4
para quienes quieran deleitarse con la maravillosa interpretación del aria “Casta Diva”, de la ópera de la que estamos hablando y que Montserrat Caballé, en plenas facultades de su brillantísima carrera, ofreció, en el 1974, en el Teatro Anthique, de Orange, y ya que estamos hablando de anécdotas, me permitiré referirme a la que en una entrevista explicó, precisamente sobre esta función, la soprano barcelonesa en una entreveista:
El Anthique, de Orange, es un teatro al aire libre, y aquel día el viento, visiblemente activo, era helado, por lo que todos los intérpretes en el escenario llevaban, bajo sus ropajes, sus cuerpos envueltos… ¡en papeles de periódico!
Cómo se reía, la Caballé, recordándolo.
Qalama,
en cuanto pare de reírme por lo de la "sorpresa de casada", te lo explico...has sido genial!!! Besos
Livia,
nadie es profeta en patria...
;-PPP
Lizzy,
ferragosto è passato, allora buona fine di agosto!
Felipe,
no no no, estas disculpas son muy light...
Enric,
gracias por este precioso comentario.
se ve deliciosa,
Hola,
Gracias por la receta, la he hecho esta noche y ha quedado muy rica. No he encontrado ricotta salada, y como leí en alguna parte que la ricotta a secas no tiene nada que ver con la salada la he sustituido por parmesano, ¿alguna otra sugerencia?
Muchas gracias por el estupendo blog
Un saludo
Tikkamasala,
me alegro de que te gustara; has hecho bien en cambiar la ricotta salada por el parmesano porque, efectivamente, la ricotta a secas es dulce y cremosa, y la salada es dura y...¡salada! Si vives cerca de un Corte Inglés, cuando ponen "Italia en el Corte Inglés" la ponen a la venta. Para rallar (y para más cosas) es riquísima.
Un abrazo
Muchas gracias por la respuesta. No tengo cerca ningún Corte Inglés por increíble que pueda parecer pero estaré atento por si la veo en alguna otra parte, de momento, seguiré usando parmesano :)
Un abrazo y gracias otra vez
CARA CANNELLA,me dio este link una amiga y ha sido todo un descubrimiento. Me encanta cocinar y estudio italiano y tu blog es una alegria.
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